El 23 de mayo sale a la luz el segundo disco de Degenerate, titulado “Rituals of rage”. Formados en el año 2016 en Amsterdam, editaron en ese mismo año una maqueta; de esa primera formación sólo queda Rens, el vocalista y guitarrista. Tras esa primera demo, grabaron en el año 2019 su primer disco y, tras un periodo de recogimiento e introspección, nos llega este segundo disco.
“Rituals fo rage” evoluciona mucho más hacia la melodía, en contraposición a su primer trabajo, mucho más fuerte y rítmico. En cuanto al estilo, los cinco primeros temas, presentan un sonido thrash potente, sobre todo en los momentos en los que interviene la parte vocal, mezclados con cambios rítmicos y punteos melódicos, muy abundantes en todo el disco.
El resto de los cortes, sin dejar ese aspecto thrash, se mueven en el terreno del death melódico y algunos momentos power sinfónico, con partes intensas y emotivas, y partes técnicas. La sección rítmica siempre activa y la parte vocal, suena agresiva y con tonos más agudos en casi todo el trabajo.
El disco abre con “Servito” que, tras una leve intro, se desarrolla veloz, combinado con un riff de guitarra machacón, coros y punteos. Una parte instrumental en base a las guitarras rítmicas, nos lleva al desarrollo inicial.
“Xenon equilibrium” echa a andar en torno a una combinación de guitarra rítmica y punteo, que nos lleva a una parte rápida y la voz agresiva; la segunda parte combina cambios de ritmo y punteos melódicos. Un break rítmico engancha con un riff potente de guitarra, que nos lleva a una última parte veloz, con sus dosis de punteos.
“The cult” es un corte potente en todo su desarrollo, sobre todo debido a una batería y a un bajo veloces; introduce algún cambio de ritmo y punteos, y vuelve a la tónica inicial.
“Illuminate” se inicia a ritmo medio, punteo y engancha con un riff de guitarra machacón, que se va alternando a lo largo del tema con varios punteos melódicos.
“Sentence of death” se inicia con una melodía de teclado que da paso a las guitarras melódicas que nos llevan a una parte con aires power metal sinfónico; un break rítmico da paso a una parte un tanto más potente, con punteos y un trabajo guitarrístico más técnico. El último tramo se desarrolla con una cadencia más melódica e intensa.
“Claymore” se inicia pausado y se desarrolla a ritmo medio y un tanto más pesado, aunque sin perder el aire melódico.
“Faceless violence” es un tema con su dosis de melodía, desarrollado en torno a un riff de guitarra potente; tiene cambios de ritmo y nunca pierde ese aire melódico.
“The blacksmith” incorpora momentos rítmicos fuertes, combinados con varios punteos, todo ello amenizado con una parte de teclado de fondo; un break rítmico con teclado nos dirige a una última parte potente combinada con punteos melódicos.
“Rituals of rage” es un tema que se inicia potente, tomando como base unos riffs de guitarra con aires speed, acompañados con la otra guitarra más melódica, que se repetirán en el corte. Incorpora cambios de ritmo y partes corales.
“The desert” entra melódico, con una base de batería muy activa; sigue a ritmo medio y la parte vocal adquiere un tono más emotivo; la segunda mitad engancha con un riff de guitarra potente, la voz intensa y una serie de punteos melódicos hasta el final.
TEMAS
- Servitor
- Xenon equilibrium
- The cult
- Illuminate
- Sentence of death
- Claymore
- Faceless violence
- The blacksmith
- Rituals of rage
- The desert
FORMACIÓN
-
Rens Hilgers: guitarra, voz
-
Daniel Ruiz Cardo: guitarra
-
Bas Bloos: batería
-
Yannick de Wit: bajo
Más información: