“...no deberías de dejar de ver si pasan cerca de tu ciudad, no te decepcionarán.” Así acabábamos la crónica de su visita a la Ciudad de As Burgas en 2017, así que acudimos al Café Cultural Auriense a ver de nuevo a los gaditanos The Electric Alley, que se subían a un escenario ourensano por cuarta vez, en esta ocasión para presentarnos las canciones de su flamante “Turning wheels”. Por supuesto no nos decepcionaron.
Buena entrada en el Auriense y es que la banda se ha ganado a pulso, concierto a concierto, un nombre entre lo más granado del rockerío ourensano, algo que no es fácil, vista la, a veces más que floja, asistencia a los conciertos de otras buenas bandas que nos visitan.
Comenzaron al igual que “Turning wheels” con la cañera Celebration para seguir, sin darnos respiro con la veloz Up in flames del “Backward States Of Society” y volver a su último disco con I've Been Taught.
Con el personal encendido a las primeras de cambio y la banda disfrutando sobre el escenario le dieron un buen repaso a “Turning wheels” con temas como Thunderbird Or Vulture, Super Blood Blue Moon o la magnífica Keep the beat on the highway cuyo estribillo fue inevitablemente cantado por un respetable cada vez más implicado con los músicos.
La banda, la verdad, es que apenas nos dejó respirar, parando solamente entre algunos temas para afinar, darle un trago a la cerveza y hablar un poco con el respetable. Esta claro que lo suyo es tocar y tocar. Y nosotros encantados.
Llegó el turno para canciones de su segundo trabajo “Get electrified!!”, el disco con el que un servidor se engancho a la banda. Así disfrutamos de la intensa Can we have some love between us? con un gran solo de Nando Perfumo, no fue el único de la noche. Con Last letter manteníamos esa intensidad in crescendo para luego crecer en fuerza con la acedeciana Wildfire de “Turning wheels”.
La rockanrolera Standing de su primer disco “Backward States Of Society” dio paso a Rusty uno de los temas más aclamados de su último trabajo que tras otro gran solo rematan magníficamente con una parte del Wicked Game de Chris Isaak.
Llegábamos al final con You give me something, de nuevo otro gran solo, y Get electrified! Que encendió sobremanera al personal que no quería dejar que la banda bajase del escenario.
No tardaron en volver para que disfrutásemos de una espléndida No control de su primer disco y cerrar de manera magnifica, al igual que “Turning wheels”, con una gran canción como Goodbye con el personal cantando con la banda.
Gran broche de oro para una gran noche de Rock con una banda que repetimos “...no deberías de dejar de ver si pasan cerca de tu ciudad, no te decepcionarán.”.