Esta edición del Lestrato Fest ha sido la más eclética de todas las celebradas hasta ahora, pues los tres artistas invitados iban a proponer estilos muy dispares.

Como buenos sabedores de lo que se destila en esta pequeña ciudad, los anfritiones Miguel y Diego nos propusieron un acústico, un rock clásico con tintes psicodélicos y un stoner de tintes mejicanos, y en ese orden para iría subiendo poco a poco la energía en la fiesta.

Mike Ross se presentaba esta vez sólo y con su guitarra acústica que dejo a más de uno embobado mirando al escenario, y es que también se puede rockear con acústica. Así pudimos disfrutar canciones desenchufadas como “Ghost hound rider” o el boogie “Harpo”, dejando un buen regusto entre un Neil Young intimista, o un Tom Petty descarnado cuando interpretó “Bamboozled”. Con una desgarradora interpretación de “Ran thru here” dejando una emotiva despedida. Luego estuvo durante toda la velada entre el público y viendo el resto de bandas.

Mike Ross

Desde Vigo llegaban los Winter Proyect y su rock con guiños psicodélicos para hacer contraste con lo escuchado anteriormente por parte de Mike Ross. Venían presentando su última obra Evolution, que tocarían entera junto algún tema de obras pretéritas. “There is a Devil inside me” abría su concierto con ese riff contundente y un sonido algo descompensado entre la voz de Jorge y el resto de la banda, que luego se fue solucionando a lo largo del set. Buscando mayor conexión con el público descargan “I’m still a child”, rock de influencias americanas donde se puede disfrutar de una labor exquisita de Pablo Calavera a la guitarra. Las palmas acompañan al inicio de una rítmica “I need you so bad” que vuelve a demostrar la valía de las guitarras de Jorge y Pablo.

La canción que les sirvió de presentación a su obra anterior suena más contundente en directo, y es que “Ashes from the past” destila menos Beatles y más rock americano en su interpretación sobre las tablas, sonando más directa y con un solo soberbio de Pablo. Palabras de agradecimiento a Lestrato y a los presentes, y Jorge nos presenta con tranquilidad “Where will you be tonight?”, una balada muy bien ejecutada por su batería Jorge Guerra para darle la candencia necesaria, junto el otro Jorge a la voz lo interpretándola con mucho sentimiento.

Con su nuevo single “Float like a butterfly” nos trasladan a la época de las vacas sagradas, incluyendo un pequeño solo de batería a cargo de Jorge y la interpretación de “Time” de Pink Floyd y que empatarían con la psicodélica “Paranoid lullaby part II”, dejando al personal en trance y recibiendo un cálido aplauso al final de ese viaje musical. Llega uno de sus momentos más destacables al interpretar “Falling in a dream”, con un solo de guitarra de Pablo que trasmite melancolía y una ejecución muy inspiradora. Se despiden con uno de sus primeros temas, “Texas queen”, que elevará la temperatura del Auriense por ese groove del bajo de Bru Vidal y un final en forma de jam, siendo despedidos con aplausos.

Winter Proyect

Despejado el escenario salían las huestes de ‘El Pafuso’ para dejar sorprendidos a todos los presentes. Intro de la banda para que entre su frotman y descarguen “Flotadores”, intenso stoner que arrasa con su increíble sonido en la pequeña sala; ni decir tiene ese imaginativo solo de trompeta y esa letra desesperante. Al grito de: Una!! Dos!! tocan “Dos”, menos pesada pero con la banda muy engrasada.

La conexión de la banda con el público empieza a ser fluida cuando atacan con “Bulla”, haciendo duetos de trompeta y trombón, y se arengan a las primeras filas. Sorprenden más si cabe en la interpretación de “El Rutger”, esa mezcla de stoner y jazz, con los metales como parte fundamental, mientras un joven guitarrista de nombre desconocido para mí arregla notas y riffs ante el recitar de El Pafuso; momento hipnótico del concierto. Charla con el público y nos entregan su canción más oscura del repertorio, “Fascista”, con una intro muy doom, donde encontramos a su cantante muy concentrado en su micro y a la banda agitando lentamente sus cuellos, llevándonos a un final muy psicodélico rozando el space rock pero con trompetas. Continúan por ese space rock stoner con “47”, siendo más dinámico todo, con un dueto de metales que hace que todos no quitemos ojos del escenario y agitemos el cuerpo.

Se acaban los viajes mentales y hacen que la gente salte con la interpretación de “La vagancia” con ese stoner con mucho groove y que es recibido muy bien. Con la lenta “El espejo” brillan ante una interpretación que supera a la del disco, con una atmósfera increíble y toda la banda sonando potente. Con “Hacia la luz” suben las revoluciones y la intensidad, demostrando que tienen canciones de sobra para agitar cabezas. Con ella amagan despedirse pero nos tienen dos temazos de bis. La primera es su ya clásico “Arrecho vengo”, brutal y casi toda la sala botando y coreando su título, dejando a todos con una sonrisa cómplice. Se despiden con un trallazo como “Don Germán”, con las palmas de los allí presentes y agitando cuerpos para hacer de esto un final de fiesta increíble.

Hasta la próxima fiesta lestraters!!!!     

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Pendejo!!