: Escrito por Zoscar

Esta semana entramos en las profundidades del cartel del Outono Códax Festival, un ciclo que ya es un clásico de Compostela y que, con su buen hacer, año tras año, se ha convertido en un referente de la música negra a nivel nacional. Hablamos de la edición número 13 para recordaros que está ahí, a la vuelta de la esquina. Así que, a tomar buena nota y, no dejéis para última hora la compra de abonos y entradas que luego os quedáis con las ganas.

Noviembre completillo, el que nos trae un Outono que llenará de cultura musical la capital de Galicia desde el día 3 hasta el 25 de noviembre. Como viene siendo habitual, los conciertos se celebrarán en la sala Capitol y el Riquela Club aunque este año el ciclo extenderá su influencia nacional con dos actuaciones en Madrid, en la FNAC y en la Sala Clamores.

Pero no todo va a ser música en directo, el festival apuesta, edición tras edición, por reivindicar otros ámbitos y espacios artísticos en los que también se vive y se comparte el arte de lo musical: la literatura, con coloquios y presentaciones en A Reixa-Matrioska; el cine, con proyecciones en la sala Numax; las catas y cenas, en diversos puntos de la ciudad; así como pinchadas, vinilos y más sorpresas que guarda una programación, tan extensa como cuidada, en la que este año tendrá un hueco especial el mundo de la radio con la grabación en directo de un imprescindible de las ondas musicales: El Sótano de Radio 3.

Y así entramos en el meollo habitual del cartel del festival: entre los nombres del cartel encontramos a viejos conocidos del festival, como The Limboos; a otros que han dejado una gran huella en su último paso por Compostela, como Nikki Hill o Nick Waterhouse; a nuevos por conocer, como The Beat from Palookaville o Pokey Lafarge; a músicos curtidos en las calles, como Dylan Leblanc; y a artistas con claro sabor galaico, y estilo peculiar, como Momboi o The Bo Derecks.

En definitiva, una vez más, será una gran oportunidad para encontrarse en directo con la música, tanto de corte internacional como nacional, en un total de 12 actuaciones, tanto en formato íntimo y cercano (Riquela) como de altos vuelos (Sala Capitol), en las que podréis reconocer y paladear los sonidos más selectos de todos esas notas que nacen en el blues y se pierden entre soul, swing, jazz, rock&roll y otros ritmos que invitan a soñar despierto.

C O N C I E R T O S

Vamos por orden cronológico para que no perdáis el hilo y grabéis en la sesera que es un mes con mucha música por delante:

SUNNY WAR

El primer bolo del festival, ¡un viernes!, será el 3 de noviembre en el Riquela: un arranque cálido en el que no caben las prisas y que nos acercará a una cantautora, atípica, llegada desde Estados Unidos; ella es Sunny War, trae nuevo disco bajo el brazo y ya el propio título, “Anarchist Gospel”, define un poco el tesoro de una artista que crece entre el sonido de Nashville y el de Detroit cultivando influencias enraizadas en el bluegrass y el Delta de un río llamado blues. Estas marcas se combinan, magistralmente y con gusto, entre notas de góspel para crear un estilo propio que no tiene miedo al difícil arte de la experimentación. Sunny War es una mirada fresca y necesaria en el universo cantautoril.

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POKEY LAFARGE / MOMBOI

El segundo plato no se hace esperar, será al día siguiente, 4 de noviembre, moviendo el cotarro al escenario de la Sala Capitol. El americano Pokey Lafarge no es ningún aficionado: con 9 álbumes en la saca, este hombre es un especialista en poner en valor lo más profundo del primigenio blues, country y swing, entre otros; pedazos de historia que rescata con soltura para darles un baño geográfico que evoca a otros paisajes lejanos de su Illinois natal: disfrútese desde la calma.

Los Gallegos Momboi traerán, desde la ría de Muros e Noia, el telón que presente la noche. Un grupo, con marcado sabor latinoamericano, que ha demostrado en directo su buen hacer, y sus ganas, y en el que se dan cita el pop, el rock y el funk para impregnar de misticismo la noche del sábado.

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THE LIMBOOS

Un día después, el domingo 5 de noviembre, el festival vuela unos cuántos kilómetros para presentarse en la FNAC de Madrid. Un evento en el que la música correrá a cargo de unos gallegos que se han afincado en la capital dando mucha guerra: The Limboos. La formación, vieja conocida de los fanáticos de este ciclo, con los pies bien asentados en las raíces del Rythm & Blues, transita las orejas del público por ritmos más tropicales y explosivos convirtiendo sus conciertos en un viaje por Chicago, Jamaica, New Orleans, Cuba y otros muchos lugares dónde la música se cuece cada día como si fuese el último. Bendita religión.

SARAH SHOOK & THE DISARMERS

A golpe de martes, el 7 de noviembre, el certamen continúa su paso por los Madriles, en concreto a la mítica Sala Clamores. Será el turno del proyecto Sarah Shook & The Disarmers que nace en 2017, al otro lado del charco, como una nota alternativa e irreverente en el mundo del country americano. Su estilo ha ido evolucionando en este relativamente corto (más de una pandemia) espacio de tiempo: en su último disco, NightRoamer, se incorporan elementos del rock, del pop y de la música indie dando protagonismo a los diferentes componentes de la banda, siempre al servicio de unas letras que continúan girando en torno al intimismo de las relaciones humanas.

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DYLAN LEBLANC

El 10 de noviembre retornamos a la base, Santiago de Compostela, concretamente al Riquela, para acoger el directo de Dylan Leblanc al que la crítica ha bautizado como el nuevo Neil Young. Pero Dylan huye de los focos, cual “Coyote”, título de su último álbum; un astuto animal que sabe lo que es vagar por las calles de Lousiana y Alabama desde muy joven un monstruo de carretera que lo dice todo con su cálida voz y su inseparable guitarra.

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KASSY VALAZZA

Tras un merecido receso, el 22 de noviembre se iniciará la última semana de conciertos de esta edición comenzando en el Riquela, retomando el formato íntimo, con la actuación de la americana Kassi Valazza. La de Arizona vendrá presentando su nuevo disco, "Knows Nothing", en el que pretende jugar con la sicología del oyente y trasladarnos a esos paisajes áridos, en principio, de su infancia, en un tono folk inglés, con un corte clásico, que se vuelve oscuro en las letras y cósmico (y sicodélico) en lo musical. Una apuesta tranquila para terminar relajadamente el último miércoles del ciclo.

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NICK WATERHOUSE / “EL SÓTANO” DE RADIO 3

A golpe de jueves 23 de noviembre, el festi saca pecho en la Sala Capitol. Por un lado, estará la grabación en directo, el poder disfrutar de cerca, de un espacio de radio de los que se encuentran en la “tarima del lujo”: es decir, en serias vías de extinción. Para los que no conozcáis El Sótano, si lo vuestro es el rock, el garage, el surf, la serie B, el gamberrismo (con clase) o, simplemente, el desenfreno de cualquier índole positiva, os invito a que pongáis la oreja en Radio 3, cada tarde de 19:00 a 20:00 (lunes a viernes), y a que no perdáis esta ocasión de bajar las escaleras y perderos disfrutando del buen hacer de Diego RJ en directo.

https://www.rtve.es/play/audios/el-sotano/

¡Para! ¡Aún hay más! Y es que esta velada esconde más motivos para pasarse por la Capitol: el señor Nick Waterhouse. Tengo un gran recuerdo del californiano, de su último paso por Santiago, allá por el lejano 2014; un artista que venía con la etiqueta de “revival soul” y que dejó buenas sensaciones y el ritmo en el cuerpo; presentaba su disco Holly, con un estilo Rythm & Blues de medios tiempos crecientes que caminaba por el filo de lo contemporáneo. En esta ocasión también presentará disco, The Fooler: encontraremos a un Nick más introspectivo, con tintes a lo Isaak, pero que, sin duda, continúa demostrando su dominio de la tradición blusera y que llena los espacios con arreglos que hacen de su música algo refrescante en el marco de lo conceptual.

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NIKKI HILL / THE BO DERECKS

¡0 días de descanso! y retomamos el tour: viernes 24 de noviembre, en el todavía caliente suelo de la Sala Capitol. El festival pisará fuertemente el acelerador, con más sabor americano: Nikki Hill; ella es electrizante, dulce y salvaje, incontenible, como una sutil distorsión que crece entre válvulas al rozar el volumen; una voz que respira, sin cadenas, en una formación de blues y rock&roll del que se pega a las entrañas y que nos acerca, un poco al menos, al espíritu de la gran Tina Turner. Esa es la sensación que ya cuajó en su última estancia en Compostela, corría el año 2017, y os puedo asegurar que allí se dejaron el alma en el escenario, para goce y disfrute de los presentes.

Aparentemente, Nikki es el plato fuerte… mas no nos olvidemos que alguien debe prender siempre la mecha: en esta ocasión, el mechero será de origen Pub Rock, un estilo que Óscar Avendaño (Siniestro Total) y los hermanos Lorre (Los Wavy Gravies, The Allnight Workers…) manejan a la perfección. Música directa, para bailar, para beber y, sobre todo, disfrutar de la noche como si Dr. Feelgood o The Bishops hubiesen bautizado la mesa. Ellos son los gallegos The Bo Derecks.

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THE BEAT FROM PALOOKAVILLE / KAMIKAZE HELMETS

Sábado 25 de noviembre, en la Sala Capitol, si habéis gestionado bien vuestros cuerpos, o si lo vuestro es sufrir como un buen blues de medianoche, nos tomaremos la de marchar.

Abrirá la velada un formato dúo con denominación ibérica: Kike Parra (batería y voz) y Gabri Casanova (Teclados y coros); dos músicos que habrás visto acompañando a artistas como Lisa and The Lips; profesionales que se manejan como pez en el agua en las escenas rock, blues y funk nacional y que han decidido unir fuerzas en un proyecto común. Ellos son Kamikaze Helmets y pretenden estrellarse en tu cerebro para gobernar tus emociones en un rock, con fuertes ataques de stoner, por el que circulan el soul, el blues y el funk sin pedir permiso; en resumen, todas esas influencias que han bebido en su carrera, se integran en su modo de concebir lo musical.

Y… queráis o no, tocará bajar la persiana. Este año serán siete jinetes del pentagrama con acento sueco: The Beat from Palookaville. Suenan a Rythm & Blues, suenan a Ska, suenan a Rock & Roll, suenan a Jamaica… Su propio nombre es una declaración de intenciones ya que para ellos una buena canción es… una buena canción (y punto). Nunca se puede saber lo que va a sonar cuando suben al escenario. Así que, déjense llevar y a ver en qué puerto atraca el fin de fiesta después de un largo y apetitoso mes de noviembre outonal.

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