Sôber Vulcano
Hace un año de su publicación, pero no me hice con él hasta este verano en formato vinilo con cd. Siendo uno de mis grupos cabecera del metal en español, su primer single  y canción que inicia este disco, “Vulcano” me dio a entender una continuidad de su obra anterior Letargo. No me había equivocado, metal y melodía por doquier, que va ser una constante a lo largo de esta obra.
 
Buen riff y ritmo para iniciar “Enterrado”, canción que conjuga partes agresivas con otras más suaves, creando esa candencia muy típica de Sôber; destaca ese interludio y solo de guitarra que hará delicias a los seguidores más acérrimos.
 
Está claro que son dueños de su propio sonido y de su evolución, así que no es de extrañar que un tema como “La escalera” sea un giro de tuerca en su estilo, con grandes momentos en las guitarras de Benardini y Jorge, y por supuesto en las voces y coros de Carlos.
 
Recuperan el pulso de su anterior obra con “El viaje”, medio tiempo que tiene su mejor baza en los coros y los arreglos de cuerda, con un estribillo muy pegadizo que puede llegar empalagar de más a alguno. Cierran la cara A con uno de sus mejores temas a mi parecer ya no solo de este disco, si no de sus últimas entregas, “Irreal”, todo esencia Sôber: melodía impresionante, dureza y guitarras afiladas a la vez que melódicas; otra gran labor de Manu Reyes en la batería, muy dinámica en los detalles.
 
No nos engañemos con el inicio de “Héroes”, quizás uno de sus temas más complejos, con esos cambios de ritmo a lo largo de la canción, poseedor de uno de sus estribillos más pegadizos del álbum y también de riffs matadores. Y riff machacante es el que inicia “Click” para desembocar en un tema muy del Letargo, con otra gran labor de Manu que es quien brilla sobre el resto; estimulantes solos de guitarra que agradecen más la escucha.
 
Si alguien estaba buscando algún resto de la etapa Sôber previa a la ruptura, va encontrar en “Papel mojado” su diamante en forma de medio tiempo evocador, con ese estribillo muy de Carlos Escobedo y esas guitarras tan envolventes y a la vez ardientes de Antonio y Jorge Escobedo; Manu Reyes sigue siendo ese baluarte tras su kit para darle mayor énfasis a la canción.
 
Un tema como “Arena” une ese pasado con su presente en la vida musical de Sôber, riff y ritmo entrecortados con melodiosas líneas vocales, un bajo por momentos angustioso de Carlos y grandes dosis de metal concentrado, dando como resultado otro de sus mejores temas del álbum.
 
Llega el que fue el segundo single, “Estrella polar”, balada muy en la línea de su anterior obra  y que realmente no llega a brillar del todo. Para cerrar se agarran al metal más pesado con “Magnolia”, otro ejercicio del sonido Sôber con esas guitarras penetrantes y esa base rítmica imponente, siendo otro de sus temas más destacables; gran cierre esperanzador.
 
Portada y libreto interesante. Producción excelente como siempre a cargo de Alberto Seara y Carlos Escobedo.  
 
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