Este disco que han sacado estos albaceteños es pura energía y actitud, siendo uno de los discos más destacables de este año.
“My own fate” abre con un tremendo riff pegajoso que apunta bien a la dirección que nos dirigen musicalmente, con la voz inicial de Antonio Robles en las estrofas iniciales despiste, luego se convierte en una bestia que enfatiza más si cabe el tema, con una potente base rítmica de Javier Mora al bajo y David Calero a la batería; mención especial para los guitarristas Alejandro Cerezo y Alejandro Egido, destripando riffs correosos y licks clásicos.
Segundo trallazo con “On the verge” donde colabora su paisano Guillermo Izquierdo de Angelus Aprátida, siendo también single de presentación; abren con unos acordes pesados para subir de revoluciones en una clara referencia la thrash metal más genuino, con esas agudas guitarras solistas en contraposición a una gruesa base rítmica, dejando para disfrute un estribillo y estructura muy en la onda Megadeth, y ese final frenético que todo seguidor de este estilo disfrutará.
“Interlude” es una pequeña pieza instrumental cargada de sentimiento en su guitarra solista, sobre una base potente de metal con tintes melódicos que se deja escuchar con gusto.
La batería de Calero abre “Six feet under”, canción que posee buenos arreglos de guitarra y un ritmo trepidante, teniendo como influencia más reconocible a Queen of the Stone Age, pero con una pizca de más metal y grandiosas armonías, continuando esa línea de trallazos.
No bajan el pulso ni las revoluciones con “Al lof them”, otra orgía de stoner y metal, con una brutal batería de Calero, unas armonias vocales de Robles muy pegadizas y unos cambios de ritmo donde son protagonistas las guitarras de los Alejandros con esos riffs infernales, teniendo muy presente el super grave bajo de Mora.
Se lanzan de nuevo al stoner más rockero, con pinceladas punk si cabe en “I’m not afraid”, tema directo y dinámico que seguro será un fijo en sus directos por su intensidad. No hay respiro cuando enfilan la recta final con “Lonely and cold”, otro trallazo de high energy rock, con una velocidad y una actitud que te deja con más ganas de verlos en directo; las guitarras vuelven desatacar por su gran calidad y pegada.
El cierre definitivo es una versión de Orange Globin, “The Wolf bites back”, trallazo que se inicia con unas acústicas y que luego rezuma stoner clásico, manteniendo el pulso rítmico en todo momento y disfrutando del juego vocal de Robles; gran final para este tremendo disco.
Portada y producción muy buenas. Para amantes del stoner y el metal, desde Queen of the Stone Age, Clutch, Orange Globin o Spiritual Beggars hasta Megadeth, Black Label Society.
