Galicia, mi tierra mágica y llena de ocultismo, abraza también el Stoner Doom con gran calidad y brillantez de la mano de este potente cuarteto.

Su monolítico inicio con “Aquarius” te deja absorto, primero por ese pesado riff a cargo de Gon.B y luego por esa brutal batería de Rust; mención aparte es la voz espacial de Beatriz Onix y del bajista Raposa!, que con maestría llena todo de sus notas mientras destripa solos su compañero a las seis cuerdas, en un tema muy bien estructurado con secciones más dinámicas y otras más doom, estirando hasta el infinito las saturaciones.

El bajo saturado de Raposa! abre la larga “The Owls are not what they seem”, más de doce minutos, una autentica delicia para los amantes del género, primero con una parte a medio gas pero potente, donde los riffs se van engarzando mientras Onix se alza con su voz sobre el resto; virando hacia una progresión más psicodélica, el wha-wah destaca sobre un bajo y una batería en plena efervescencia psicotrópica. En medio del tema suenan más heavies, bajo el riff principal y con Onix más visceral, acompañada de cavernosos coros, aumentando el ritmo, llegando a su parte más doom introducidos por esos flangers saturados que despedirá la canción con un halo muy Sabbath.

Después de este largo episodio, la oscuridad reina más si cabe con “Balor, as sete pálpebras”, con ese bajo profundo abriendo para que retumben las paredes de tu casa, en un ritmo lento donde Onix alarga las palabras, hasta que la batería de Rust rompe con dinamismo y entra ese riff contagioso que hará cabalgar al oyente en una sección muy agradecida; luego de ralentizarse lo suficiente para coger aire, atacan de nuevo con un nuevo ritmo y riff para deleitarse con las figuras del bajo de Raposa!, y del los guitarrazos de Gon.B.

“Al-Quibla” cierra con sus más de doce minutos, iniciado por un hipnótico bajo que va rondar el cerebro junto la voz de Onix hasta la eclosión de toda la banda, jugando con las sensaciones auditivas, dejando espacio para que todos los instrumentos brillen, intercalando ritmos y riffs, pero todo con un aire muy del sur; solos de bajo y guitarra, batería increíble de Rust, y sobretodo, mucha compenetración musical, despidiendo el tema con autentico Stoner Doom.

Portada y producción muy buenas. Encantará a todo seguidor del Stoner Doom, Stoner Metal, seguidores de bandas como Sleep o Electric Wizard.
 
Más información: